Un Panorama Estancado para la Obra Pública

En una reciente entrevista con Canal E, Gustavo Weiss analizó las proyecciones para el sector de la construcción en 2026. Su mensaje fue claro: la inversión en infraestructura se mantendrá en niveles alarmantemente bajos, similares a los de este año.

Según Weiss, el presupuesto nacional para el próximo año no presentará cambios significativos, lo que configura un futuro sin crecimiento para la obra pública. Aunque algunas provincias, como Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, podrían continuar con proyectos financiados localmente, la situación en general no invita al optimismo. «El mercado privado no está logrando sostener costos de construcción razonables», afirmó, citando el aumento en el precio del metro cuadrado en dólares como una importante barrera.

Proyectos en Riesgo por Falta de Rentabilidad

El presidente de la cámara subrayó que el aumento de costos hace que muchos desarrollos sean inviables. «La rentabilidad de los proyectos está en juego hasta que se reactive el crédito hipotecario», agregó. A este ritmo, Weiss anticipa que 2026 será una repetición de 2025 en términos de inversión y desarrollo.

La Urgente Necesidad de Inversión

Weiss enfatizó la insuficiencia del 0,4% del PBI asignado a infraestructura en el presupuesto actual. «Es irrisorio frente a las enormes necesidades del sector y, además, no se ha ejecutado totalmente», comentó, reflejando la desmotivación en la industria.

Deterioro de la Infraestructura y Rol del Sector Privado

Al ser consultado sobre el impacto de esta política en la infraestructura del país, Weiss no dudó: «Estamos camino a un deterioro creciente debido a la falta de inversión». Argentina lleva consigo décadas de desinversión, afectando gravemente rutas, ferrocarriles, hospitales y escuelas.

La escasez de inversión también eleva los costos logísticos, un factor crucial para la competitividad argentina. «La infraestructura representa uno de los gastos más altos para competir a nivel global», apuntó Weiss.

Esperanza en las Concesiones

Sobre la posibilidad de concesionar obras a empresas privadas, Weiss se mostró favorable: «Es positivo que se permita la operación privada, pero esto no elimina la responsabilidad del Estado en la inversión». Aclaró que, en países desarrollados, sólo el 15% de la inversión en infraestructura proviene del sector privado, mientras que el 85% es estatal.

A pesar de que la concesión de rutas, como la Ruta 14 y el puente Rosario-Victoria, es un paso en la dirección correcta, Weiss advirtió que se trata de una solución temporal. «Es un paliativo, no una solución estructural», concluyó.