El paro de controladores aéreos se llevará a cabo entre las 8 y las 11 de la mañana, mientras la Secretaría de Trabajo ha convocado a una reunión a las 10 horas. Se ha solicitado a los pasajeros estar atentos a sus pasajes y al estado de sus vuelos. En el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, ya se han registrado demoras; por ejemplo, varios vuelos de Aerolíneas Argentinas a Catamarca, San Juan y Ushuaia, que tenían salidas programadas entre las 9 y las 10, están ahora reprogramados para las 11.30.

Una situación similar afecta a un vuelo de Flybondi, también con destino a Ushuaia. Por otro lado, algunos vuelos de Aerolíneas Argentinas hacia Santiago del Estero y Jujuy han sido adelantados, con nuevos horarios de salida a las 7.40 y 7.30 respectivamente.

Este paro se produce en un momento crítico, ya que la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA) ha señalado un cronograma de paros de entre dos y tres horas que continuarán en las próximas semanas, provocando cancelaciones y reprogramaciones en un periodo de alta demanda, como es el ajuste a las festividades de Navidad y Año Nuevo.

El gremio exige un incremento salarial que no ha sido atendido por las autoridades gubernamentales. Desde el 17 de diciembre, los vuelos nacionales se verán afectados de manera progresiva, extendiéndose eventualmente a los internacionales.

El conflicto entre ATEPSA y la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA) se origina en las paritarias firmadas en septiembre. El sindicato sostiene que el acuerdo firmado tras un paro en agosto no se está cumpliendo, lo que ha llevado a una escalada en las protestas.

A pesar de la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo durante la última gran protesta, los desacuerdos entre las partes no han cesado. Noviembre trajo un cronograma de paros que afectó principalmente los vuelos de carga, pero la situación ha vuelto a intensificarse tras una nueva reunión sin consenso.

El Gobierno ha calificado el paro como «ilegítimo» y ha advertido que su impacto podría ser mayor al anticipado. La postura del sindicato ha sido definida como “inflexible”, lo que ha llevado a la convocatoria a una nueva reunión para este miércoles. Desde la Secretaria de Transporte, se han expresado preocupaciones sobre cómo estas medidas afectarán a miles de pasajeros en la época más ajetreada del año.

Las autoridades insisten en que la interrupción de servicios esenciales como el transporte aéreo durante las festividades no solo es inadmisible, sino que perjudica a cientos de miles de argentinos dependientes de estos vuelos para reunirse con sus seres queridos.