El estudio, que abarcó precios recolectados durante noviembre de 2025 en diversas zonas de Córdoba, se centró en una familia compuesta por dos adultos y dos hijos en edad escolar. El costo promedio de la canasta se situó por encima de los $540 mil, aunque las variaciones dependen significativamente del tipo de establecimiento utilizado.

Diferencias Notables según el Tipo de Comercio

Los supermercados y grandes cadenas ofrecieron los precios más económicos para la CBA, destacándose por sus tarifas considerablemente más bajas en comparación con los pequeños comercios.

En contrapartida, almacenes y despensas barriales mostraron los precios más altos al momento de realizar la compra de alimentos. Los autoservicios, en cambio, se posicionaron en un nivel intermedio, ofreciendo precios que no alcanzan los de los supermercados, pero son más altos que los de las despensas.

Factores que Influyen en las Discrepancias de Precios

Esta brecha de precios se debe a la capacidad de cada tipo de comercio para comprar en volumen y a la estructura de precios en cada canal. Algunos elementos dentro de la canasta alimentaria exacerban las diferencias, mientras que otros las minimizan.

Análisis por Rubros: ¿Dónde se Agravan las Diferencias?

El desglose detallado de los precios revela el origen de estas variaciones. En cuanto a carnes, un rubro crucial dentro de la canasta, los supermercados ofrecieron un costo promedio de $245.246, en contraste con $261.674 en autoservicios y $265.595 en almacenes de barrio.

En el sector de almacén, las grandes cadenas mantuvieron sus precios en $52.456, mientras que los autoservicios y negocios barriales alcanzaron $57.283 y $62.828, respectivamente.

Si consideramos huevos y lácteos, nuevamente los supermercados lideraron con un costo de $56.175, en comparación a $58.580 en autoservicios y $64.731 en almacenes.

Una Excepción Interesante: Frutas y Verduras

El único rubro que presenta una tendencia contraria es el de frutas y verduras. En este caso, los precios más competitivos se registran en los comercios de cercanía, con un promedio de $75.227 en almacenes y $75.204 en autoservicios, mientras que los supermercados ofrecen precios superiores, alcanzando $80.237.

Este comportamiento ayuda a reducir, en cierta medida, la diferencia general de precios en la canasta, aunque no compensa completamente las variaciones en rubros más representativos, como carnes y productos secos.

En un contexto de inflación persistente y con el poder adquisitivo en constante presión, estas discrepancias en los costos de la Canasta Básica Alimentaria evidencian que el precio de los alimentos no solo depende de la naturaleza de los productos, sino también del canal comercial utilizado para su adquisición.