En una conversación reciente con Canal E, el economista Federico Vaccarezza destacó las implicaciones de la ampliación de la banda cambiaria y su efecto en el proceso de desinflación. Este cambio se produce en un contexto marcado por las exigencias del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la presión de vencimientos de deuda en dólares que Argentina enfrenta en 2026.

Expectativas del Mercado ante el Nuevo Escenario Cambiario

Vaccarezza reveló que el movimiento del Banco Central era anticipado por los actores del mercado. “Era un ajuste que muchos ya esperaban, lo que quedaba pendiente era clarificar el nuevo esquema”, afirmó. Este ajuste no solo influye en el tipo de cambio, sino que también afecta las expectativas relacionadas con los bonos y la inflación en el país.

Ajuste Controlado: Devaluación o Corrección?

El economista evitó calificar el ajuste como una devaluación abrupta, prefiriendo referirse a él como una “corrección cambiaria controlada”. Indicó que esta medida podría acelerar el ritmo de devaluación y, como consecuencia, podría generar un aumento en la inflación, superando los índices de este año.

“Si ampliamos la banda cambiaria, estamos posiblemente aumentando el ritmo de devaluación”, advirtió Vaccarezza, sugiriendo que esto podría desacelerar el proceso de desinflación que el país viene gestionando a lo largo de 2025, manteniendo niveles similares a los actuales.

Preferencia por Bonos Ajustados por Inflación

Ante esta nueva realidad económica, se ha comenzado a notar un cambio en la preferencia de los inversores. Vaccarezza mencionó que se está generando un interés notable por los bonos ajustados por inflación. “El retorno a los bonos CER, que había perdido protagonismo, ahora cobra fuerza nuevamente”, explicó, señalando que las expectativas están modificándose.

Impacto de la Modificación en el Sistema de Bandas

El ajuste en el sistema de bandas responde a una fuerte apreciación del tipo de cambio anterior. Vaccarezza indicó que muchos en el mercado ya anticipaban esta situación. Además, señaló que la corrección del tipo de cambio está alineada con las exigencias del FMI, que requieren ajustes por inflación como parte de su programa.

“Esta corrección era algo que se estaba pidiendo y, en gran parte, se debía a la necesidad de acumular reservas”, concluyó Vaccarezza, destacando la relación entre la política cambiaria y el contexto financiero global actual.