Incremento del Salario Mínimo: Controversia y Reacciones en Colombia
El anuncio del nuevo salario mínimo en Colombia ha generado un intenso debate, con críticas sobre cómo el alza podría beneficiar a la clase política y dejar atrás a los trabajadores informales.
Un Aumento Significativo
Este 29 de diciembre, el presidente Gustavo Petro comunicó en cadena nacional que el salario mínimo para 2026 se establecerá en $1.750.905, complementado por un auxilio de transporte de $249.095. De esta manera, el monto total alcanzará $2.000.000. Este incremento del 23,7% respecto al salario mínimo actual ha suscitado diversas reacciones.
Críticas desde la Oposición
La exalcaldesa de Bogotá, Claudia López, no tardó en manifestar su descontento a través de redes sociales. Expresó que este aumento podría favorecer significativamente a los congresistas, insinuando que la clase política se vería beneficiada a costa de la población más vulnerable.
Respuesta del Ministerio de Trabajo
Antonio Sanguino, actual ministro de Trabajo, salió al cruce de estos comentarios, aclarando que el salario de los congresistas no está vinculado al salario mínimo. «Cualquier congresista puede aclarar que su salario no se ajusta con el aumento del mínimo”, afirmó Sanguino.
El Lado Oscuro del Aumento
Claudia López argumentó que este incremento no ayudará a la mayoría de los trabajadores colombianos, en especial a quienes se encuentran en el sector informal, que representa el 56% de la fuerza laboral. Según sus palabras, los informales no verán mejoras en sus ingresos y, por el contrario, enfrentarán un aumento en el costo de vida.
La Perspectiva de López
“Si Petro aumenta el ‘mínimo’ en un 23%, será una de las transferencias de riqueza más grandes de la historia, beneficiando a los funcionarios, pero dejando atrás a los trabajadores informales”, destacó la excongresista, haciendo hincapié en la creciente desigualdad social.
