¿Tienes una pareja tóxica?

Hay formas de detectar si tu pareja es tóxica. Al principio todo parece color de rosa pero de repente el «Príncipe Azul» se transforma en alguien que manipula, controla y maltrata. En esta nota, las señales de alerta: Parece que tocamos el cielo con las manos, estamos viviendo una historia de amor de ensueño pero empezamos a notar ciertos comportamientos que nos inquietan. Llamadas constantes para saber dónde estamos, celos enfermizos, enojos injustificados, comentarios ofensivos. Por lo general, son los hombres con baja autoestima quienes plantean este tipo de relación, aunque a veces son ellas quienes “intoxican” la pareja, pudiendo incluso pasar de la violencia verbal y psíquica a la física. Las personas tóxicas son seductoras y tienen la característica de venderse como “salvadores” frente al otro. Por lo general, buscan a quienes necesitan contención afectiva, o que fueron maltratados por su familia o su pareja anterior para mostrarse como la mejor alternativa y siempre recordarle al otro lo mucho que hicieron por ayudarlo. “A veces el amor puede elegir la vía equivocada para expresarse. Lejos de crecer juntos, ambos se plantan en una lucha sin cuartel y parece que se odiaran en vez de amarse”, explicó la psicóloga Beatriz Goldberg, autora del libro “Parejas tóxicas” de editorial Kier. “Hay un desmesurado deseo de posesión por parte de uno de los miembros de la pareja, que se encuentra con una persona sumisa, o bien, con alguien rebelde que lo enfrenta. Pero todo se basa en la desvalorización del otro”, sostuvo. Signos de que tu pareja es tóxica: Competencia encubierta: Cada vez que le vas a contar algo, te doblega en lo que hizo y te quita mérito. Por ejemplo, si te ofrecen un trabajo nuevo o un día tu jefe te felicita por un logro, él te dice que “no es nada del otro mundo” como para que estés tan contenta. El objetivo es que te sientas mal y no disfrutes de las cosas buenas que te suceden. Momentos de indiferencia: Pasa de un extremo al otro: de estar todo el tiempo pendiente de vos a hacerte un vacío total con el único fin de inquietarte. Es controlador: Controla todos tus movimientos, analiza cada cosa que hiciste o le contaste, sospecha que lo engañaste o que hiciste algo malo si no logró saber dónde o con quién estabas. Vive pendiente de tu teléfono porque quiere saberlo todo. Juega al detective y al acusado: Busca bajarte la autoestima de cualquier modo porque él mismo la tiene baja y siempre te hace sentir que estas en falta. Tiene enemigos imaginarios: Sus enemigos son todas aquellas personas que te pueden reforzar la autoestima, como tu familia, carrera, trabajo, amigos etc. Busca darte celos: Encima de que te controla y te cela, en vez de inspirarte confianza y tranquilidad, doblega la apuesta y busca hacerte enojar. Chequea todo el tiempo su celular y lo mira de manera socarrona. Se hace el misterioso para que entres en pánico, te enojes y poder acusarte de celosa. Siempre da vuelta las cosas: Si le contás algo que te pasó, siempre tendrás la culpa de lo sucedido. Si alguien te llamó y le hacés un comentario, seguramente no le importará el motivo de la llamada sino que te hará un interrogatorio de por qué esa persona tenía tu número, cuándo se lo diste, etc. Por supuesto, que terminará enojado y la culpa será exclusivamente tuya. Claro que hasta espera que le pidas disculpas. ¿Se puede reciclar una pareja tóxica? Goldberg asegura que sí, aunque ello depende de que tan extrema es personalidad del otro y si no roza lo psicótico. “Se puede cambiar enfrentando al tóxico y no soportando más sometimientos. Hay que negociar y no ceder en todo. Hay cosas que no se pueden permitir jamás, que nos impongan que dejemos el trabajo, no vernos con nuestros amigos, no estar con nuestros hijos. Hay que mostrarles que no tenemos miedo a perderlos, aunque a veces es lo mejor que nos puede pasar”, finalizó Goldberg. Fuente: http://www.infobae.com/notas/708047-Como-detectar-si-una-pareja-es-toxica.html