Felipe VI convocó una tercera ronda de consultas para evitar las elecciones

La decisión del monarca fue comunicada al presidente del Congreso de los Diputados, el socialista Patxi López, según informó la Casa Real en un comunicado. El pasado 2 de febrero, Sánchez, secretario general del Partido Socialista (PSOE), segunda fuerza política más votada en las elecciones del 20 de diciembre, aceptó la oferta de Felipe VI de intentar formar gobierno, pero después de más de dos meses de negociaciones no logró sumar los apoyos suficientes para encabezar el Ejecutivo. Aunque en principio tenía tiempo hasta la medianoche del 2 de mayo para llegar a un acuerdo, las esperanzas de Sánchez de convertirse en el presidente de un gobierno «transversal» de cambio se truncaron con la última negativa del partido de izquierda Podemos a sumarse al pacto suscrito entre los socialista y los liberales de Ciudadanos. El líder de Podemos, Pablo Iglesias, anunció el viernes pasado que entre el 14 y el 16 de abril sometería a consulta de las bases del partido antiajuste la posibilidad de apoyar ese acuerdo, algo que parece poco probable puesto que implicaría rechazar la postura que hasta ahora mantuvieron los dirigentes morados. No obstante, si esta iniciativa sigue adelante, la opinión de los militantes de Podemos se conocerá antes de las nuevas consultas del rey, con lo que aún tienen tiempo para dar un golpe de timón y cambiar el rumbo de España, que se dirige casi de forma ineludible hacia una repetición de elecciones. En la primera ronda de consultas, el presidente del gobierno en funciones y vencedor en las elecciones del 20 de diciembre, Mariano Rajoy, declinó la oferta del monarca de formar gobierno por no contar con más respaldo que el de su Partido Popular (PP), que en cuatro años pasó de ser mayoría absoluta a primera minoría. Dando un paso al costado, el líder conservador pretendía ganar tiempo para esperar que Sánchez fracasara en su intento de formar gobierno para luego volver a tomar la iniciativa, previendo las dificultades que tendrían los socialistas para pactar con Podemos, principalmente por la condición de planteada por la tercera fuerza de celebrar un referéndum secesionista en Cataluña que el PSOE rechaza. Sin embargo, en estos meses Rajoy no consiguió ni siquiera acercarse a quienes eran considerados sus socios naturales, el nuevo partido Ciudadanos, mientras le estallaron nuevos casos de corrupción en su partido. Por el contrario, los liberales, cuarta fuerza política, forjaron un acuerdo con el PSOE, que si bien se quedó corto en número de votos para permitir que Sánchez pueda llegar a La Moncloa, sirvió para mostrar la capacidad de diálogo y negociación de los líderes de esos dos partidos de cara al futuro escenario electoral. El candidato del PSOE pretendía negociar su investidura en base a un programa de reformas apoyado tanto por Ciudadanos como por Podemos, para luego llegar a un acuerdo de gobierno abierto a ambas fuerzas. Pero la incompatibilidad declarada entre los dos partidos emergentes, así como el plan de Podemos de imponer a los socialistas un «gobierno de izquierda» -que necesita del apoyo explícito e implícito de nacionalistas vascos y secesionistas catalanes- , hizo que hasta ahora haya sido imposible. Con esta tercera tanda de contactos, Felipe VI hará un último sondeo para constatar si puede proponer otro candidato a la presidencia con apoyos en el Congreso o, por el contrario, tiene que proceder a la disolución de las Cortes Generales (ambas cámaras) y convocar nuevas elecciones generales. De acuerdo con el comunicado del Palacio de la Zarzuela, el 21 de abril el presidente del Congreso le hará llegar al rey una lista con los representantes de los grupos políticos que concurrirán a las consultas y, ese mismo día, se comunicarán las fechas y horas en que serán recibidos. López explicó que el rey Felipe VI quería celebrar una «ronda final» para ver si se había producido alguna evolución en la situación de bloqueo político en la que se encuentra España, pero no tiene la obligación de propo