Este jueves, la sala de la Cámara alta se convirtió en un escenario de confrontación. La senadora por Tierra del Fuego, Cándida Cristina López, no escatimó en reproches durante su intervención, marcada por problemas técnicos con su micrófono y constantes interrupciones por parte de la presidencia del recinto.

Tensión en el Recinto: Un Micrófono Silenciado

La situación escaló cuando el micrófono de López falló mientras intentaba expresar una cuestión de privilegio. En medio de la confusión, la legisladora afirmó: “Pensé que me iban a censurar, porque evidentemente no estamos en una casa democrática”. Estas palabras acentuaron un clima ya de por sí candente.

Acusaciones de Autoritarismo

López denunció lo que considera un “autoritarismo” por parte de Villarruel. “La presidenta del cuerpo demuestra un comportamiento autoritario y representa represalias por haber votado en defensa de los 30.000 desaparecidos”, agregó entre gritos de sus colegas.

Denuncia de Agresiones en el Senado

La senadora no se limitó a las críticas hacia su colega vicepresidenta; también relató incidentes de “agresiones físicas y tocamientos impúdicos” que sufrió en su despacho durante un operativo a principios de diciembre. Este evento ocurrió cuando fuerzas de seguridad del Senado le impidieron el acceso a su oficina, un hecho que consideró inaceptable bajo las nuevas disposiciones de Villarruel.

Desalojo y Tácticas de Intimidación

Aseguró haber encontrado su despacho bloqueado y con una faja de restricción, además de la remoción de una placa con su nombre, un acto que la senadora calificó como un “ataque personal y profesional”.

Interacción Agresiva con Victoria Huala

Durante su exposición, López tuvo varios cruces verbales con Villarruel, quien le exigió que mantuviera el respeto en el debate. En medio de este tira y afloja, la diputada Victoria Huala (PRO) también entró al intercambio, lo que culminó con la frase contundente de López: “Callate mamarracho”, resonando en el recinto.

Un Contexto de Tensión Parlamentaria

Este conflicto no se da en un vacío; sucede en el marco de una reciente renovación parlamentaria marcada por tensiones y resistencia, lo que anticipa enfrentamientos continuos en la actividad legislativa que se avecina.