Las acciones no son sólo un pedazo de papel
Cuando usted compra una acción de una empresa, está
comprando un porcentaje de participación en su capital. Los dueños
son todos los accionistas y cada acción representa una parte de los
activos de la compañía.
Las acciones siguen a las ganancias
En el corto plazo, el comportamiento del mercado de
acciones se basa en el entusiasmo, el miedo, los rumores y las
noticias. En el largo plazo, en cambio, son las ganancias de las
distintas empresas las que determinan cuando el precio de las
acciones subirá, caerá o se mantendrá estable.
Las acciones tienen un comportamiento mucho
más volátil que el de otros activos
La otra cara de los altos rendimientos de las
acciones es su volatilidad, la variación alrededor de la tasa de
retorno esperada. Un bono de corto plazo tiene algo de volatilidad.
Pero el rendimiento de las acciones varía en gran medida alrededor
de su rendimiento promedio. Esto es lo que llamamos volatilidad. De
todos modos, esto no significa pérdida de capital, sino simplemente
una variación temporal del precio.
Una acción no siempre sigue al mercado
Una buena acción puede experimentar una suba cuando
el mercado tiende a bajar, mientras que una mala acción puede bajar
cuando el mercado está en su mejor momento. Generalmente medimos el
desempeño del mercado por medio de índices. En estadística, un
número índice es aquél que representa el precio de un conjunto de
activos en un determinado momento. En el caso de los índices
bursátiles, representa el precio de una cartera teórica de acciones.
Los índices más seguidos son, en Estados Unidos, el S&P 500, y en
Argentina, el Merval.
Un buen desempeño pasado no es garantía para
el futuro
Los precios de las acciones se basan en las
proyecciones de ganancias a futuro. Un buen track record es un buen
presagio, pero hasta la mejor de las compañías puede tropezar.
El precio de la acción no indica el valor
real
Como el valor de una acción depende de las
ganancias, una acción de $ 100 puede ser barata si las perspectivas
de ganancias de la compañía son lo suficientemente elevadas. Por
otro lado, una acción de $ 2 puede ser muy cara si el potencial de
ingresos es débil, ya que su precio puede caer incluso desde el
valor más bajo.
Cómo operar afuera sin sacar dinero del país
Cualquier inversor latinoamericano puede invertir en
cualquier mercado de acciones del mundo con montos muy bajos sin
necesidad de salir al exterior. Existen varios Fondos Comunes de
Inversión locales que invierten en acciones globales, aunque sobre
todo en Estados Unidos. Y también hay certificados de acciones
extranjeras, los CEDEARS, que replican los movimientos de muchas
acciones globales, que se pueden negociar en los mercados locales.
Diversificación
Como regla general, es mejor invertir en acciones de
compañías que tengan su actividad en distintas industrias de la
economía. De ese modo, si un segmento de la economía cae, uno tiene
otro segmento de la economía donde apoyarse. También es aconsejable
diversificar por país o región, de tal forma que si una región anda
mal, podamos apoyar nuestra cartera en el mejor desempeño de la otra
región
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