Mar del Plata sumó otro récord negativo. Además de su condición de capital nacional de la desocupación -con una tasa de desempleo del 21,9%, según la última encuesta del Indec-, ahora se convirtió en la ciudad más cara de la Argentina, desplazando de los primeros puestos a Bahía Blanca y San Miguel de Tucumán.
.
A casi dos años de la devaluación y cuando los precios parecen estabilizados, está claro que el impacto de la inflación no es igual en todo el país. La suba en los precios de la canasta básica fue mucho mayor en el interior que en Buenos Aires, que hoy pasó a ser la ciudad más barata del país, desplazando a Mendoza, que tenía ese privilegio hasta enero de 2002, según un relevamiento de los precios de 170 productos de marcas líderes (alimentos frescos y no perecederos, bebidas y artículos de perfumería, tocador y limpieza) que realiza la consultora Tomadato en las siete ciudades más importantes del país,
.
En la otra punta de la escala se encuentra Mar del Plata, donde el costo de esa canasta básica es un 10,7% superior al valor que tiene en Buenos Aires. Esto significa que al incremento promedio que se dio en la Capital Federal y el GBA en los precios de artículos de primera necesidad -que desde la devaluación, según el Indec, fue del 68,7%-, en Mar del Plata hay que adicionarle una suba extra del 10,7% y en Bahía Blanca (la segunda ciudad más cara del país), un 7,95 por ciento.