Sergio Echebarrena: «Gracias al Estado, con YPF se reconvirtió la mala política energética de los ’90»

El presidente de la Cámara de Proveedores de la Industria del Petroenergética (Capipe), Sergio Echebarrena, destacó que «el autoabastecimiento energético se perdió por la política energética de los ’90 que fue equivocada», y subrayó que «desde el Estado, con YPF, a partir de 2012 se revirtió esa situación en favor del aumento de la producción, y hoy el horizonte de reservas es diferente». «El autoabastecimiento energético se perdió porque la política energética establecida en los 90′ fue equivocada, fue sólo de producción para vender y hacer caja y no hubo inversión en reservas», aseguró Echebarrena a radio Continental. El dirigente empresario puntualizó que «desde el Estado, con YPF, a partir de 2012 se ha revertido esa situación», y remarcó que «la producción de YPF en gas y petróleo ha crecido y hoy el horizonte de reservas es diferente». Explicó que «al haber crecido la economía, se demandó más energía», y señaló que «los hidrocarburos, que son recursos estratégicos, tienen que ser utilizados con una visión de política de Estado, que es la que se recuperó en 2012». «La producción de YPF en gas y petróleo ha crecido y hoy el horizonte de reservas es diferente» twitter «Una economía y una industria que crecieron muchísimo y demandaron más energía y una política establecida en los ’90 que fue errada, derivó en la pérdida del autoabastecimiento y la necesidad de divisas», indicó Echebarrena. A su criterio, «debe haber una política de recursos que lleve si es posible al autoabastecimiento para ahorrar divisas y la renta de los hidrocarburos debe ser utilizada para el desarrollo industrial». En ese sentido, aseguró que «YPF tiene una política adecuada de mantener la exploración, la perforación de pozos, aún con estos precios del petróleo». Destacó que «en Argentina hay una especie de precio sostén del barril del petróleo, que con un esfuerzo fiscal de Estado y provincias se les paga a las petroleras entre U$S 67 y U$S 68, cuando el crudo externamente sale menos de U$S 45». Al respecto, afirmó que «es una política adecuada que permite sostener un cierto nivel de actividad», y puso como ejemplo que «en Colombia la situación es crítica, se cayeron 60% los ingresos del Estado, y hay 40 mil puestos de trabajo menos en el sector energético». «Como los precios que reciben las petroleras no baja, tampoco baja la nafta en el surtidor. Pero esto permite que muchos estén trabajando y no estén en crisis como en otros países», aseguró el titular de Capipe.