Turquía ordenó arrestar al ex futbolista Hakan Sükür por presuntos vínculos golpistas

Un fiscal turco emitió una orden de arresto contra Hakan Sükür, ex diputado y leyenda del fútbol de su país, por su presunta vinculación con el predicador Fethullah Gülen, al que el presidente Recep Tayyip Erdogan acusa del intento de golpe de Estado fallido del 15 de julio. Sükür, máximo goleador con su selección con 51 tantos y de la liga turca, con 249 gritos, vive con su familia en Estados Unidos desde diciembre pasado por lo que se se generó una orden internacional pidiendo su detención y entrega a Turquía. Se lo acusa de «ser miembro de una organización terrorista armada», en referencia a la cofradía de Gülen, quien también reside en los Estados Unidos. También se generó una orden de búsqueda y captura contra el padre de Hakan, Sermet Sükür, empresario del sector de la construcción, al no hallarlo en su domicilio, consignó la agencia EFE. Los vínculos de Hakan Sükür con la cofradía son conocidos desde la ruptura en otoño de 2013 entre el movimiento gülenista y el partido gubernamental, el islamista AKP, hasta entonces firmes aliados. Sükür, que era diputado del AKP desde junio de 2011, renunció al partido, aunque no de su escaño, en diciembre de 2013 en protesta por la decisión del Gobierno de cerrar las academias educativas asociadas al movimiento de Gülen. El ex deportista reiteró entonces su fidelidad a «Hizmet» (nombre de la cofradía) y describió a sus integrantes como «gente sincera que apoyaba al Gobierno en todo lo que les parecía bueno para el pueblo», incluido la captación y el apoyo a votantes del AKP. Guys, the fastest goal in World Cup History was by Turkey’s Hakan Şükür in 2002; 0:10 seconds into the game: http://t.co/OVM00QxoCn — Chris Allen Brown (@Christopher625) 16 de junio de 2014 Sükür, que convirtió el gol más rápido de la historia de los mundiales, tras 11 segundos en un partido, en la Copa del Mundo de 2002, denunció en su cuenta en Twitter el golpe fallido del 15 de julio y calificó a los golpistas de «traidores» y «canallas que disparan contra su propio pueblo». Pese a ello, sus vínculos con la cofradía causaron indignación entre los seguidores de su antiguo equipo, el Galatasaray, que pidieron expulsarlo del club.