Orlando Cánido revela la compra de Cunnington: una jugada estratégica en el mercado de bebidas
El empresario detrás de Manaos, Orlando Cánido, compartió detalles sobre la reciente adquisición de la marca Cunnington, una maniobra financiera que apunta a fortalecer su posición en un sector cada vez más competitivo.
En una reveladora entrevista en un podcast de negocios, Orlando Cánido, propietario de la famosa marca de gaseosas Manaos, confirmó la compra de Cunnington, realizada al contado y sin financiamiento. Esta decisión refleja un enfoque audaz en un mercado donde la competencia se ha intensificado.
Una compra sorpresiva y rápida
La compra de Cunnington se concretó de manera inusual, ya que Cánido no llevó a cabo una revisión exhaustiva del negocio ni de la planta antes de cerrar la operación. Este acto de confianza se tomó en un contexto de urgencia, donde la velocidad fue crucial. “La negociación se estableció de forma directa, y el cierre se realizó en una entidad bancaria local”, detalló el empresario, quien enfatizó la necesidad de actuar rápidamente en un entorno empresarial desafiante.
La competencia y el futuro del mercado
La decisión de Cánido de adquirir Cunnington no fue fortuita. Desde hace años, la marca competía directamente con Manaos y, en la actualidad, la concentración del mercado de bebidas ha llevado a una drástica reducción de competidores. “Hace veinte años había decenas de fabricantes, y hoy quedan muy pocos en pie”, dijo, subrayando la importancia de esta compra en el contexto actual.
Además, el empresario expresó su preocupación por la posibilidad de que un grupo internacional hubiera tomado el control de Cunnington, lo cual habría añadido más presión competitiva. Al hacerse con la marca, pretende no solo consolidar su liderazgo en el sector, sino también reforzar la posición de Manaos, que ya abarca una gran parte del mercado de gaseosas en Argentina.
Controversias y aclaraciones
Cánido también se refirió a la investigación por presunta evasión fiscal que lo afecta. En medio de la polémica, enfatizó que la operación fue completamente formal y declarada, negando cualquier irregularidad. Aseguró que sus decisiones siempre se han guiado por principios empresariales y no por factores externos.
Con esta adquisición, Manaos no solo se posiciona como líder en el mercado de bebidas sin alcohol, sino que también establece un nuevo estándar en la industria, en un contexto donde la concentración de marcas y el control de la producción y la distribución son cada vez más relevantes para el éxito empresarial.
