viernes, diciembre 26, 2025
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Mi meta antes de los 45: crear mi propia bodega a los 27

Santiago Achával: El Contador que Transformó su Pasión por el Vino en Éxito Mundial

La historia de Santiago Achával es un viaje desde los números hasta la poesía del vino. Su travesía, que comenzó en Minnesota y se forjó en Córdoba, ha dejado una marca indeleble en la vinicultura argentina.

Un contador que dejó su carrera para dedicarse a la producción de vino, transformándose en un referente del Malbec. Logrando reconocimiento internacional, Achával revela su camino en el apasionante mundo del vino.

Un Inicio Inesperado en el Mundo del Vino

Santiago Achával no es el típico enólogo argentino. Tras estudiar Ciencias Económicas y cursar un MBA en Stanford, el ambiente de Napa Valley despertó su interés por la viticultura. “Lo que me atrapó fue el aura del vino, su historia y cómo se entrelaza con la humanidad”, comparte Achával, quien siempre soñó con hacer vino.

Un Salto al Emprendimiento

Proveniente de un entorno donde ser contador era el camino esperado, Achával decidió cambiar de rumbo tras obtener su título. “En Stanford, me enseñaban a seguir mis sueños. Con 27 años, sabía que quería tener una bodega antes de los 45”, recuerda con determinación.

El Comienzo de una Aventura Vitivinícola

En los años 90, después de varios intentos y investigaciones, Achával, junto a sus cuñados, consiguió conectarse con la vitivinicultura. Aunque el sueño inicial estaba en pausa, la llegada del enólogo italiano Roberto Cipresso les dio un nuevo impulso. Juntos decidieron apostar al Malbec, un viraje crucial que cambiaría el rumbo de su carrera.

Logros y Reconocimientos

La primera gran victoria llegó con el Finca Altamira 99, un Malbec que rompió esquemas, obteniendo cinco estrellas en Decanter. “El reconocimiento fue gradual. Primero, desde el extranjero, y luego resonó dentro de la gastronomía porteña”, explica Achával.

La Evolución hacia Matervini

Tras vender Achaval Ferrer en 2009, Achával y Cipresso fundaron Matervini. Su objetivo sigue siendo explorar nuevos terroirs, enfocándose en Malbec de viñas viejas con un enfoque innovador en suelos no aluvionales, una búsqueda constante por la expresión auténtica del vino.

Hacia Nuevas Fronteras en la Viticultura

Más allá de Mendoza y Salta, el enólogo planea incursiones en la Patagonia. “Estamos descubriendo el potencial de cada valle argentino; hay un futuro prometedor”, señala. Con un enfoque en el Merlot, busca establecerlo como el nuevo referente de la región patagónica.

Una Misión de Emoción

Achával siente que el camino hacia la excelencia vitivinícola está lleno de exploraciones y descubrimientos. “No sé si veré la meta, pero lo emocionante es la búsqueda continua por crear vinos que evoquen emociones profundas”, concluye, revelando su pasión y compromiso con la vinicultura.

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