Logros en la Seguridad: Disminuyen Extorsiones y Homicidios en Lima Durante Estado de Emergencia
A lo largo de 66 días de estado de emergencia, la policía peruana ha reportado una significativa reducción en las denuncias por extorsión y homicidios en Lima y Callao. El balance es alentador y marca un cambio en la percepción de seguridad de los ciudadanos.
Balance Positivo en la Lucha contra la Extorsión
El Comandante General de la Policía Nacional del Perú (PNP), Óscar Arriola, ha dado a conocer que, desde la implementación del estado de emergencia el 22 de octubre, las denuncias por extorsión han disminuido un 23%. En total, se registraron 1.756 casos comparados con 2.363 en el periodo previo de similar duración, del 17 de agosto al 21 de octubre.
Estadísticas que Respaldan los Resultados
Arriola destacó que la evaluación debe realizarse sobre períodos equivalentes para captar el impacto real de las acciones durante la emergencia. Además, se debe considerar la información oficial proporcionada por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Según los datos de enero a septiembre de 2025, la tasa de victimización pasó del 27,1% al 25,1%, lo que demuestra una reducción significativa.
Percepción Ciudadana y Medidas de Evaluación
El funcionario subrayó que la percepción de seguridad, aunque no siempre coincide con las cifras, es parte vital del análisis de la seguridad ciudadana y ha mostrado una mejora de 0,9 puntos en este último período.
Próximos Pasos: Plan Nacional de Seguridad Ciudadana
De cara al futuro, Arriola anticipó que el Ejecutivo presentará el Plan Nacional de Seguridad Ciudadana, que será considerado un legado del gobierno. Este plan se enfocará en combatir el sicariato y las extorsiones, incorporando elementos actualizados de teorías de orden público y estrategias modernas de seguridad.
Desafíos y Estrategias Actualizadas
El plan incluirá ajustes necesarios frente a la creciente violencia de los delitos y la complejidad de las organizaciones criminales. Aunque basado en estrategias del pasado, el enfoque está adaptado a la realidad actual, buscando intervenir de manera temprana en áreas donde se presenta un deterioro del orden público.
