Una joven alemana llamada Michele Kobke logró reducir a 40 centímetros el tamaño de su cintura, aunque para cumplir con ese objetivo no visitó el quirófano sino que usó durante tres años un corsé extremadamente ajustado, un método tan extravagante como polémico por las consecuencias negativas que en el futuro podría ocasionarle en su salud.
La mujer tiene 24 años, de los cuales los últimos tres los pasó encorsetada a un vestido diseñado el siglo pasado, que se lo quitó nada más que para ir al baño pese a las advertencias médicas sobre posibles daños que pudiera experimentar a futuro en su espalda. Cabe destacar que en principio la cintura de Michele era de 64 centímetros. Según afirman, busca igualar a la estadounidense Cathie Jung, con medidas de 38 centímetros