Al declarar el martes pasado ante el juez de instrucción Javier Ríos, Rey reconoció haber enviado ese mail, que indicaba textualmente: «Mi empleada doméstica hoy me comentó que vive en la casa tomada de al lado y que sospechan del portero del edificio porque es un tipo que siempre acosa verbalmente a las mujeres». Rey indicó que no conoce a Mangeri, y relató que envío el correo a raíz de los comentarios de su empleada, quien -dijo- vive en la casa contigua al edificio en el que residía Ángeles, en una «casa tomada». La empleada doméstica fue citada para hoy por el juez Ríos, para profundizar ese supuesto dato sobre los acosos verbales de Mangeri. Para la defensa del portero, la existencia de ese mail es un indicativo de que cuando Mangeri fue a declarar no estaba convocado como «testigo» sino que ya había una sospecha en su contra, por lo cual se trató de una «indagatoria encubierta», a la que consideran nula.
Declara la mujer que dijo que Mangeri decia obscenidades a las chicas
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