Un SMS desata un violento drama pasional

Una mujer acuchilló a su concubino al descubrir que éste recibía mensajes de texto de una mujer, que lo invitaba a vivir una noche de placer y luego amenazó con matarse delante de sus hijos de 10 y 13 años. Dramáticos momentos vivieron dos hermanos —domiciliados en el Quinto Pasaje, sin número, del barrio Salta Prolongación, de Santiago del Estero— cuando en horas de la madrugada del jueves sus padres comenzaron una fuerte discusión, dentro de la habitación matrimonial. Según informaron fuentes judiciales, el hecho de violencia ocurrió cerca de la medianoche del día 19, del corriente mes, cuando la víctima —de apellido Mendoza— recibió un mensaje de texto en su celular, que decía “No me contestaste si quieres conocerme y pasar un buen momento, te puedo dar la mejor noche de tu vida, dale hermoso”. Estas líneas fueron leídas por su concubina, quien de inmediato comenzó a exigirle explicaciones. Mendoza le manifestó que no conoce a la persona que le envió ese SMS. Su básica excusa no convenció a la irritada mujer, quien le propinó un golpe de puño a la altura de la cabeza. No conforme con esa agresión, la mujer —identificada como Palmira V, de 31 años de edad— tomó un cuchillo con el que intentó cortarse a la altura de las muñecas. Para evitar que ocurriera una tragedia, el acusado la tomó de los brazos y la tiró sobre la cama para quitarle el cuchillo. Fue allí cuando ingresaron sus hijos de 10 y 13 años. El menor aprovechó que su padre le tenía los brazos, le quitó el arma blanca, y salió corriendo de la habitación. Esperando que ella se tranquilizara, el hombre salió hacía el patio trasero de la vivienda. La mujer, lejos de poner paños fríos a la situación, corrió detrás de él. Al ver que era perseguido, el acusado ingresó a la morada para buscar un bolso, tomar algunas de sus prendas de vestir y retirarse de la casa La actitud del hombre incrementó aún más la furia de la mujer, quien tomó un machete e ingresó a la habitación con intenciones de matarlo. Ambos forcejearon, ella terminó nuevamente sobre la cama, quedando él con el arma. Cuando Mendoza salió de su casa para irse, Palmira corrió hasta la cocina, tomó un vaso de vidrio, lo estampó contra la pared y tomando solo un pedazo le gritó que si se marchaba se iba a matar. Al ver que su concubino, de todos modos se iba a ausentar, le arrojó un pedazo de vidrio provocándole un corte en una de sus manos. Mendoza notó que su pareja estaba dispuesta a todo, por lo que se fue hasta la casa de su hermano, con la mano ensangrentada, a pedir ayuda. Éste lo llevó hasta el hospital, donde fue asistido. Los médicos le practicaron siente puntos de sutura, para evitar el sangrado. Una vez que fue dado de alta, en compañía de su hermano, regresó a su casa, a donde fue recibido por su pareja con un palo de escoba. Esta tomó el elemento y se lo asentó en la cabeza, y causó daños en el rodado que él conducía. El herido alcanzó a tomar un bolso y se retiró de la casa. Mendoza radicó la correspondiente denuncia en la Oficia de Violencia de Género de la Unidad Fiscal, de la ciudad de La Banda. Por pedido de la fiscal Marta Elena Ovejero, el Dr. Ramón Gómez ordenó la inmediata detención de la mujer, quien quedó alojada en la Comisaría Nº2 del Menor y la Mujer. En tanto, los hijos menores de la pareja quedaron al cuidado de su padre. Fuente: http://www.elliberal.com.ar/ampliada.php?ID=107013