Es para salvar la temporada. Siempre la rebaja fue del 10 al 15%
Poder regatear el precio de la habitación por noche en el mostrador del hotel. Pagar menos por una carpa o una sombrilla en un parador. Ir al teatro en pareja y abonar una sola entrada. Sentarse a comer y aprovechar las promociones. Todo eso se podrá hacer en febrero en Mar del Plata, que estará de remate después de un enero que no termina de cumplir las expectativas de los operadores turísticos. Para el próximo mes, los empresarios de varios rubros preparan descuentos. Por un lado, quieren -al menos- empatar los números con el saldo del año pasado, por otro atraer a los turistas que aún dudan de venir a La Feliz.
Esta temporada todos los rubros afectados al turismo sintieron el impacto de un cambio de costumbre que fue tendencia el año pasado y éste se reafirmo: visitar la ciudad por cuatro o cinco días sobre el fin de semana y reducir el consumo para volver durante el año o elegir otro destino. En diálogo con Clarín, los operadores turísticos reconocen que no supieron amoldarse a esta nueva forma de vacacionar y hasta dicen que le “erraron” a las propuestas. Por eso, entre ayer y anteayer, se reunieron para fijar descuentos. De esta manera, descansar durante febrero en Mar del Plata será bastante más barato.
“Históricamente, enero es entre un 10% y un 15% más caro que el mes siguiente. Pero acordamos que la diferencia este año será de entre un 15% y un 20% para casas y departamentos”, avisó Horacio Espatolero, vicepresidente 1º del Colegio de Martilleros de Mar del Plata. Corrientes, la calle de las inmobiliarias, ya tomó nota: ayer colgaron carteles escritos a mano ofreciendo las rebajas.
En hotelería aún definen de cuánto será el descuento que será decidido por el dueño del lugar. “Nunca hubo diferencia de valores entre enero y febrero. Posiblemente mantengamos los precios, pero al momento de cerrar se podrá flexibilizar en el mostrador ”, concedió un referente en hotelería de Mar del Plata.
Los balnearios fueron los que tomaron la posta respecto de las rebajas. Ellos lo sufren por partida doble: estadías cortas y sólo cuatro días aprovechables de playa. Por eso reducirán el precio de la sombra un 20% y lo volverán a bajar en marzo.
“El tiempo no nos favoreció -señaló Jorge Riccilo, presidente de la Cámara de Empresarios, Balnearios y Afines- y por eso, la reducción del precio”. Entonces para el mes que viene una carpa se conseguirá, en promedio, a $160. Una sombrilla a $120.
En gastronomía es difícil programar descuentos, sobre todo porque en Mar del Plata la oferta es amplia. Por eso en los restorán se ofrecen promociones. Algunas incluso, para compartir. Como una milanesa con guarnición y bebida que no llega a las $60 y que pueden disfrutar un adulto y un chico.
“ Por la inflación, tendríamos que haber aumentado un 30% pero esta temporada lo fijamos en 20%. Más no se puede bajar porque ya estamos perdiendo rentabilidad ”, explicó Eduardo Palena, presidente de la Asociación Hotelera y Gastronómica.
En diversión nocturna también habrá descuentos. En La Caseta hoy la entrada anticipada para varones y mujeres (excepto los jueves, día en que ellas entran gratis) cuesta 80$ y en puerta, $120. En unos días el ticket pasará a valer $60 y $80.
“Queremos mover gente como en los mejores fines de semana de enero, por eso decidimos que la entrada sea más barata. Pero además no queremos dejar afuera a los marplatenses que no están dispuestos a sacar de su bolsillo lo que paga un turista”, dijo Ignacio Blanco, gerente de esa disco ubicada en El Faro, al sur de Mar del Plata.
Todas estas rebajas se suman a la que ya anticipó el gobierno bonaerense respecto de los teatros. Fue cuando el productor Carlos Rottemberg habló de “milagro” si llegasen a convocar medio millón de espectadores. Para atenuar ese impacto, se dispondrá del 2×1, un mecanismo utilizado en muchas salas porteñas. La Provincia, entonces, se hará cargo de la entrega de subsidios a las compañías que quieran integrar el sistema y se inscriban en un registro, en simultáneo con una estrategia de promoción entre privados y Estado