La diputada nacional por Libres del Sur- FAP Victoria Donda relató anoche la conmovedora historia de su nacimiento en la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), en la que estuvo involucrado el médico obstetra Jorge Luis Magnacco que, tras una investigación de Hijos en la que demuestran que violó la prisión domiciliaria, volvió a una cárcel común luego de ser condenado por delitos de lesa humanidad.
«Magnacco cortó mi cordón umbilical. Mi mamá cuando llegó a la ESMA, cuando llegó el momento de tenerme, pidió que una compañera la ayude, esa compañera es mi tía del corazón ahora. Mi mamá no quería que intervenga este médico. Fue la que me recibió. Magnacco vio si estaba viva, le dejó un hilo de cocer azul con aguja de cocer por si mi mamá se había desgarrado», contó.
El médico que fue condenado por firmar varios certificados de nacimiento de hijos de desaparecidos nacidos en cautiverio en la ESMA, es uno de los 67 acusados en el tercer juicio que se lleva adelante por crímenes de lesa humanidad cometidos en ese centro de detención.
«Magnacco es un médico que, faltando al juramento que tienen los médicos de cuidar la salud de las personas, prestó su profesión para actuar como obstetra en la maternidad clandestina que existió en el centro clandestino de detención que funcionó en la escuela de mecánica de la armada», sostuvo Donda.
El médico fue visto paseando por el Shopping Patio Bullrich, en Recoleta, y tras un video difundido por la agrupación Hijos, el tribunal Oral N° 5 de la Capital Federal ordenó la su detención y su envío al Complejo Penitenciario Federal II de Marcos Paz
«No hay excusa para que el tipo este paseando por la calle Florida, este tipo de beneficios tiene que ser revisado. Para mí, y para cualquiera de todos nosotros, este es un nuevo cachetazo. La verdad es que ya no es justo. Necesitamos un Estado que nos resguarde a quienes fuimos víctimas y a quienes siguen siendo víctimas», finalizó la diputada