Dos mujeres fueron secuestradas por cinco encapuchados en Paraguay. Sus cabezas fueron encontradas en una bolsa de basura y sus cuerpos calcinados en una camioneta Ford Ranger.
Investigadores sospechan que se trató de un ajuste de cuentas.
Los familiares reconocieron los cuerpos por la ropa que usaban. Las cabezas fueron cortadas antes de incendiar sus cadáveres ya que no se encontraban quemadas.
Una de las mujeres fue concubina de un hombre con antecedentes por narcotráfico que fue asesinado hace unos años. Además, hace dos meses fue asesinado un amigo de la familia de las víctimas.
Las jóvenes fueron identificadas como Adriana y Fabiana Aguayo Báez. «Encontramos un hacha, un machete y motosierras. Se ve que fueron torturadas antes de ser quemadas, las cabezas no estaban en el lugar», comentó un comisario.