Kicillof reiteró que la Argentina está dispuesta a seguir negociando

El titular de Palacio de Hacienda, Axel Kicillof, dijo hoy que “la Argentina reitera que quiere negociar, está dispuesta a pagar a todo el mundo en condiciones equitativas, justas, legales, sin violar ley argentina ni extranjera, y haciéndolo en base a una negociación plausible”. El ministro aseguró que “nadie quiere un default, nadie festeja un default” y remarcó que “la Argentina ha pagado en la forma en lo que lo hace habitualmente” al 92,4 por ciento de los bonistas que ingresaron al canje de 2005 y 2010. “Hay un bloqueo del cobro que está funcionando como un instrumento extorsivo para el país”, aseguró el funcionario. Kicillof encabezó esta mañana la apertura de la reunión del Consejo Suramericano de Economí­a y Finanzas de la Unasur, en el Palacio San Martín, junto al canciller Héctor Timerman. “La Argentina está sufriendo un ataque violentísimo de capitales financieros especulativos, conocidos como fondos buitre”, dijo y recordó que “la Argentina, durante años, tomó deuda para pagar deuda” y “en cada refinanciación venían nuevas imposiciones”. En cuanto al fallo a favor de los fondos buitre, que fue dictado por Thomas Griesa, juez federal de Nueva York, Kicillof indicó que “es inédito e insólito” y “es un intento de tirar abajo la reestructuración de nuestra deuda externa”. En este sentido, dijo que los fondos buitre utilizaron como argumento la cláusula pari passu, por la que “cuando uno emite nueva deuda, de la deuda que está en pago, no puede darse un privilegio legal” a ningún acreedor. “El juez Griesa lo interpretó de otra forma que el gobierno de Estados Unidos, el brasileño, el gobierno francés, ni todos los que se presentaron como amicus curiae, que entendieron que no tenía razonabilidad”, dijo Kicillof. El ministro aseguró que Griesa “entendió que los buitres debía cobrar al mismo tiempo que los tenedores reestructurados”. Kicillof precisó: “La Argentina no puede pagar a sus deudores del canje si no le paga al mismo tiempos a los buitres. Eso es una extorsión judicial”. El funcionario nacional puntualizó que es lo que la Argentina ha hecho ante este fallo “incumplible”, como lo calificó: “Si nosotros pagamos lo que reclaman los buitres, el 92 por ciento de los tenedores que reestructurados tendrían derecho a reclamar lo mismo. Así, no hay reestructuración posible”. El ministro explicó que, después de 2001, la Argentina ha hecho esfuerzo para reestructurar su deuda, ya que sin ella no hay forma posible de poner en marcha a un país. “Todos los problemas que había generado el sobre-endeudamiento (la Argentina) los fue solucionando. Pagó sus compromisos con el Fondo Monetario Internacional, juicios pendientes con el CIADI y reestructuró su deuda con el Club de París. Todo está normalizado”, indicó. El titular del Palacio de Haciendo afirmó que la deuda con privados, con títulos públicos, fue sometida a un proceso de larga negociación, que concluye con dos canjes de 2005 y 2010, que logró una adhesión voluntaria de 92,4 por ciento. “Quedó afuera un 7,6 por ciento. El único objetivo de los buitres consistía, no en acordar con la Argentina, si no litigar en tribunales para obtener el 100 por ciento de sus reclamos. Lo han hecho durante 13 años. Negociar nada, embargar todo, para cobrarse todo bajo extorsión”, dijo. La Argentina negocia Kicillof reiteró que “no es que la Argentina no quiera negociar, al contrario, ha negociados con todos” y que el 1 por ciento de los fondos buitre que litigan “no quiere negociar porque quieren obtener ganancias por 1.600 por ciento. Ningún negocio productivo o financiero tendría sentido si este tipo de ataque triunfa, porque a todo el mundo le conviene hacer este negocio”. En cuanto al cumplimiento de los pagos de la Argentina a los tenedores de bonos reestructurados, el ministro dijo: “Lo que ha hecho la Argentina es lo que debería que hacer, lo que marca nuestra ley, que es seguir cumpliendo con nuestras obligaciones.